El cielo no es para mi (retrato de Teresa de Calcuta)
Lámina, impresión digital sobre papel couché de 350 gr. de 30 x 40 cm firmada por el mimísimo autor (o sea, yo).
Parece ser que la gran Teresa de Calcuta no fue tan "gran" y jugó con el dolor de las personas agónicas como un medio de purificación para acercarse a Dios. Un "medio" que ella olvidó cuando cayó enferma. Claro, siempre hay clases.
Y de ahí mi dibujo de niña mala, con el saludo de la West Coast, donde nació el "gansta rap" y la leyenda " L.H.O.O.Q " sobre su gorra, un guiño a mi admirado Duchamp.
Imprescindible para los malotes del arte.
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